lunes, 23 de diciembre de 2013

Discapacidad en el contexto socioeducativo



Este mes os dejamos un pequeño resumen de las diferentes opciones educativas que existen cuando hablamos de educación de personas con Necesidades Especiales (NEE).

La educación puede constituir uno de los pilares para favorecer la autonomía y la inclusión social. En la actualidad el 75% de la población europea con discapacidad no pasa de la educación obligatoria y menos del 10% llega a la universidad. En el caso de España la relación entre el número de alumnos con discapacidad en la Educación Secundaria Obligatoria y los que cursan enseñanzas postobligatorias de Bachillerato y FP es de veinte a uno.

La educación ha de consistir en favorecer el pleno desarrollo de la persona, tenga o no una discapacidad. Con ello se persigue preparar a la persona para enfrentarse a las exigencias de la vida y de la sociedad. En el caso particular de los estudiantes con discapacidad, la actividad educativa ha de procurar ajustarse a las características del estudiante, proporcionándoles las medidas y recursos que necesita, en el lugar y momento adecuados y además, eliminar las barreras físicas, comunicativas, sociales, etc que pueden encontrarse.


La escuela debe ser un lugar privilegiado para combatir las actitudes discriminatorias, crear comunidades de acogida y en definitiva, construir una sociedad integradora. Pero la educación no es sólo cuestión de la escuela, si no que es un aspecto que se extiende a la familia, amigos y sociedad en general.

El papel de la educación de personas con discapacidad ha pasado de un modelo basado en el déficit a un modelo educativo de atención a las Necesidades Educativas Especiales. Este último constituye un modelo de escuela para todos, con el cambio que ello supone tanto en las prácticas educativas como en el diseño de servicios.

A partir de la década de los 60, comenzaron a surgir opiniones en contra de este tipo de escuelas segregadas, se incorpora el concepto de normalización.
Desde este nuevo planteamiento se considera que los centros especiales aportan un ambiente educativamente inadecuado, también se considera que en determinadas ocasiones se precisa cierta institucionalización debido a que algunos casos requieren de un cuidado continuo y más especializado.
A finales de los 60 y principios de los 70 el sistema educativo da acogida al alumnado con discapacidad y adopta un planteamiento de atención a la diversidad, dando así lugar a la escuela integradora. De todos estos cambios surge un nuevo punto de vista, el de las NEE. Este planteamiento tiene como principal referente el Informe Warnock, documento que desarrolló la integración en el Reino Unido y que, posteriormente, influyó en sistemas educativos de todo el mundo. Este informe se oponía a las tradicionales dicotomías de sistema especial vs. Ordinario y de alumnado deficiente vs no deficiente y planteaba un sistema que respondiera a todas las necesidades que el alumnado pudiera presentar para adaptarse al currículum ordinario. A dicho alumnado se le denomina como “alumnos con NEE”.
La implicación más importante del planteamiento del concepto de NEE es que se pasó de considerar a la Educación Especial centrada en los déficits a estar centrada en las necesidades educativas, y por tanto, en la respuesta a dar a dichas necesidades por parte del contexto educativo.
El concepto de NEE supone, una mayor integración y una ruptura con la modalidad educativa diferenciada de la ordinaria. La integración del alumno puede ser total o parcial.
El planteamiento de las NEE también está recibiendo algunas críticas principalmente motivadas por considerar que ofrece un enfoque exclusivamente centrado en la problemática individual y por tanto dando lugar a estrategias centradas en el individuo. A ello se ha añadido que el término “especial” ha cobrado con el paso de los años un carácter peyorativo. Ambos factores han conducido a la utilización de otros términos, como el de “necesidades educativas específicas”, o los más amplios de “atención a la diversidad” e “inclusión educativa”.

Un poco de legislación sobre educación:
La consideración de los estudiantes con necesidades especiales, pese a que previamente ya existían centros de educación especial (privados) se realizó por primera vez en nuestro país con la Ley General de Educación en 1970. En ella se establece la escolarización en centros de educación especial cuando la profundidad de las anomalías lo hagan absolutamente necesario y se fomentan las unidades de educación especial en centros de régimen ordinario para cuando sea posible escolarizar en ellas al alumnado con deficiencias leves.
 
La Ley Orgánica de 1990 de Ordenación General del Sistema Educativo LOGSE, estableció que el sistema educativo tendría los recursos necesarios para que los alumnos con NEE, ya fuesen temporales o permanentes, pudiesen alcanzar los objetivos marcados con carácter general. Establece también que la escolarización en unidades o centros de educación especial sólo se llevará a cabo cuando las necesidades del alumno no puedan ser atendidas por un centro ordinario.

La Ley Orgánica de 2006, de 3 de Mayo, de Educación LOE, en su Titulo III sobre la Equidad en la Educación pretende la plena integración de los alumnos con NEE, y define en su artículo 73 al alumno con NEE de este modo que éste quedaría integrado en una categoría más amplia denominada Necesidades Específicas de Apoyo Educativo (NEAE) que integraría además de al grupo de alumnos con NEE a los grupos de alumnos con dificultades específicas de aprendizaje, con altas capacidades intelectuales, de incorporación tardía al sistema educativo y de especiales condiciones personales o de historia escolar.

Se puede elegir entre varias opciones…

Los alumnos con NEE serán escolarizados en los centros ordinarios. Esta medida se establecerá cuando se considere que el alumno puede alcanzar un grado aceptable de integración social en un grupo escolar ordinario. Se considera que cuando se cuenta con los recursos necesarios, los resultados son satisfactorios e incluso superiores a los obtenidos mediante la segregación, a lo cual se añaden motivos de tipo social.

Diferentes modelos de integración. Entre las posibilidades figuran las siguientes:
a) Centro y aula ordinaria.
a.1) En el aula ordinaria el 100% del tiempo.
a.2) En el aula ordinaria con asistencia a tratamientos personales.
a.3) En el aula ordinaria a tiempo parcial con asistencia de apoyos.
b) Centro ordinario y aula específica de educación especial.
b.1) En el aula específica con asistencia a tiempo parcial a las actividades curriculares de un grupo-clase en una aula ordinaria.
b.2) En el aula específica con asistencia a actividades extracurriculares.
c) Centro de educación especial y centro específico de educación especial.
c.1) En un centro especial con asistencia a un centro ordinario a tiempo parcial, escolarización combinada.
c.2) En un centro especial el 100% del tiempo.
d) Otros posibles desplazamientos, hospitales, residencias, domicilios, etc.
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Algunas orientaciones:

Antes de realizar cualquier tipo de intervención será necesario realizar una evaluación inicial. En relación al alumno es interesante conocer aspectos como: sus intereses, su estilo de aprendizaje y su autoestima. Pero también es necesario partir del conocimiento sobre las ayudas y apoyos con los que cuentan.
Con respecto a la etapa educativa existe una serie de problemas comunes a las distintas etapas, entre los que destacan los siguientes:
§    La presencia de numerosas barreras físicas y de comunicación, así como la falta de adaptación del transporte.
§         La excesiva derivación de los alumnos con NEE a aulas o centros especiales.
§         La escasez de ayudas técnicas adecuadas
§         La ausencia de apoyo a las familias de los alumnos.
§   La falta de coordinación entre las distintas instituciones y servicios que afectan al alumnado con discapacidad.

En la etapa de educación infantil de 0 a 6 años se producen varias situaciones problemáticas en relación a la atención a estos alumnos, entre las que podemos destacar las siguientes:
§         Existe una insuficiencia de plazas que afecta a todos los alumnos.
§       A los centros de educación especial sólo pueden acceder los casos gravemente afectados, desde los tres años y si viven en la población en la que se ubica el centro.

En la etapa de la educación obligatoria de 6 a 16 años la problemática más habitual suele ser:
§   La escasez de profesionales especialistas, maestros, educadores sociales, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, auxiliares, etc.
§      Inestabilidad laboral de los profesionales.
§      La falta de formación específica sobre la temática que nos ocupa, tanto en profesores como en tutores e incluso en los propios especialistas.
§      La no aplicación de medidas de adaptación curricular por parte del profesorado.

Nuevos planteamientos: La educación inclusiva.

El planteamiento de la educación especial condujo a la segregación de aquellos alumnos distintos o con dificultades que eran rechazados por el centro o el aula ordinaria. A continuación surgió el planteamiento de integración de este alumnado. Más recientemente se adopta un paso más allá, mediante el planteamiento de la Escuela Inclusiva. Tiene como características fundamentales la preocupación por la diversidad, la reestructuración de las escuelas y la vinculación con la sociedad.  
La educación inclusiva se basa en la valoración de la diversidad como elemento enriquecedor y consecuentemente, favorecedor del desarrollo humano. La escuela inclusiva es para todos.
El planteamiento inclusivo considera que no existe ninguna razón legítima para separar a los niños, que únicamente la educación inclusiva puede reducir el miedo, los prejuicios y aumentar el respeto y la comprensión hacia las personas con discapacidad.
La educación inclusiva no se refiere tanto a la colocación de un estudiante como a su participación en la sociedad.

El fin último que persigue la educación inclusiva es el cambio del sistema educativo y el crear una sociedad inclusiva, más humana y justa.


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